primera

Madrugada de sábado, música electrónica, raices chinas con huevos revueltos (bajos en colesterol con omega 6) y panes de centeno, sal marina, aceite de olivas extra virgen de cultivo biológico, agua alta en minerales cuyo sabor metálico fastidia a muchos y me recuerda la existencia de aguas menos duras y menos interesanes, la bahía al fondo en la noche y un departamento en caos total por la reciente pérdida de las mujeres que le daban un orden a mi vida y me permitían reinar sobre el pequeño fundo que creé a mi alrededor y trato de mantener organizado. Un despertar sediento como casi cada mañana causado por el exceso de proteinas en la dieta y la falta de unos minutos para tomar agua.
Recuerdo cuando decidía mi viaje al sur, no había una luz que me guiara hacia alguna parte pero creía que la iluminación llegaría y la paz en algún momento invadiría mi vida. La insatisfacción reinaba mis actos, y descubrir paisajes nuevos me emocionaba, pero creo que en realidad, la emoción más grande estaba dada por dejar atrás una vida de exigencias que eran creadas por mí mismo, miedos traídos desde la niñez y fortalecidos por una vida solitaria y socialmente restringida donde el camino para descubrir cada esquina de la vida y la relación con el ser humano estuvo recargada de temores y dudas. Siempre perisistió la sensación de que el mundo sabía algo que yo no y que al final nunca averiguaría; cada vez que comenzaba algo, sentía que había información vedada para mí, por eso los demás hacían las cosas mejor que yo y me estaban calificando... aún hoy en medio de una nueva zoociedad en la cual brillo, los espacios nuevos me confunden un poco y tengo que prestar atención; miedo al fracaso pero no por el fracaso en sí sino por ser juzgado y señalado. Y todo eso es lo que quería dejar atrás, y lo que abandonaba en mi vida una y otra vez, todo se tiraba a la basura y se reiniciaba un nuevo camino..... bueno parece que la luz al fin llegó: un nuevo periodo productivo en mi vida, muchos caminos para elegir y un lugar en un mundo difícil, solitario, calificador pero libre de miedos y dudas. La iluminación no estaba aquí, la zoociedad no es la causa, el mar tampoco y parece que esa luz la traje conmigo del norte y proviene de la llama que siempre ha iluminado a mi familia.
Necesita ser alimentada cuidadosamente y por eso mi comida es costosa!!